Cuando la glándula tiroides debe ser operada por un nódulo, usualmente la cirugía mínima es la extirpación del lóbulo y el istmo tiroideo. Durante la operación se puede realizar una biopsia por congelación (corte congelado) que puede, en muchos casos, definir benignidad o malignidad. Si la biopsia por congelación no es concluyente, hay que esperar el estudio definitivo. La tiroidectomía total usualmente se indica cuando la glándula tiene nódulos bilaterales, así como también en la mayoría de los tumores malignos.
Indicaciones para la cirugía
Las razones más frecuentes para recomendar la cirugía de la glándula tiroides, por un especialista, son: la sospecha de cáncer, nódulos que no dejan de crecer, que son grandes o producen síntomas (Ej. dolor, dificultad para tragar o respirar, etc.). La cirugía también es una opción de tratamiento para el hipertiroidismo.
Exámenes previos
Los comunes para cualquier intervención quirúrgica (laboratorio de rutina, radiografía de tórax y evaluación cardiovascular) y las relacionadas con alguna otra enfermedad (Ej. diabetes).
Para el estudio del nódulo con frecuencia el especialista indica: pruebas de función tiroidea, ultrasonido tiroideo y citología por punción. Eventualmente: gammagrama tiroideo, tomografía axial computarizada (sin contraste) o resonancia magnética y evaluación de las cuerdas vocales (especialmente si ha presentado ronquera).
Si se sospecha, el carcinoma medular, una enfermedad poco frecuente, se indican unas pruebas particulares para esa afección.
¿Como es la cirugía?
La cirugía de la tiroides en general es bien tolerada y no es muy molesta. Si el paciente debe ser operado, no deberá comer ni beber nada después de la media noche anterior al día de su cirugía. El cirujano usualmente tarda entre 2-2 ½ horas, después de lo cual el paciente se despertará poco a poco en la sala de recuperación. Puede tener tubo para drenaje quirúrgico en el lugar de la incisión que se retirará lo antes posible y que no es muy molesto. Puede doler un poco la garganta al tragar y que mejora con los analgésicos indicados. Una vez que esté bien despierto, se traslada a su habitación. Luego de aproximadamente 6 horas, podrá comer y beber cuando lo desee. También es conveniente movilizarse lo antes posible. A la mayoría de los pacientes puede dárseles de alta a la mañana siguiente de la operación siempre que se sientan bien y no se presente ningún problema. El cirujano retira los puntos de sutura de 7 a 15 días después de la intervención. El paciente se reintegra a sus actividades normales generalmente a partir de los 15 días.
Complicaciones
Si bien son infrecuentes, las más importantes son la parálisis de las cuerdas vocales, por lesión de los nervios recurrentes laríngeos y la hipocalcemia por lesión de las glándulas paratiroides. La mayoría de las veces estas complicaciones son transitorias.
Costo de la cirugía tiroidea
Generalmente se trata de una operación de 2 horas o menos y una estadía hospitalaria hasta el día siguiente (24 horas). La mayoría de los seguros la cubren. El precio o costo de una intervención puede variar debido a lo extensa de la operación, por la complejidad de cada caso, el tiempo de estadía hospitalaria, el tipo de institución, como los principales factores. Es recomendable, como cualquier cirugía, que se realice en una institución reconocida y que cuente con todos los servicios y especialidades que permitan la resolución de eventuales problemas de manera temprana y a cualquier hora. De allí que el costo no debe ser el principal factor a tomar en cuenta